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Por Paz RojasSenado aprueba adhesión de Chile al Acuerdo de Escazú
Tras una votación histórica y el polémico rechazo a este acuerdo en la administración anterior, Chile se convertirá en el décimo tercer país en ratificarlo.
Con 31 votos a favor, 1 en contra y 11 abstenciones, el Senado aprobó el acuerdo de Escazú, que busca garantizar la protección de los Derechos Humanos en asuntos ambientales. Con esta adherencia, el proyecto fue enviado a la Cámara de Diputados para que el Gobierno comunique su aprobación.
El texto adoptado el 4 de marzo de 2018 en Escazú, Costa Rica, es oficialmente llamado Acuerdo Regional sobre el Acceso a la Información, la Participación Pública y el Acceso a la Justicia en Asuntos Ambientales en América Latina y el Caribe y es el primero del mundo que contiene este disposiciones específicas en esta materia.
De esta forma, la aprobación de este acuerdo internacional se alinea con los compromisos medioambientales del presidente Gabriel Boric para enfrentar la crisis climática. En estos, se busca asegurar el derecho al agua, la adopción de una economía circular, la reducción de las zonas de sacrificio y la transición energética, entre otros puntos que buscan proteger nuestro patrimonio natural.
¿Qué es el tratado de Escazú?
De acuerdo a la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el tratado de Escazú es una herramienta para el cuidado del medio ambiente y los derechos humanos, que hace hincapié en la protección de los defensores de la ecología. Así también, busca facilitar el acceso a la información, participación pública y el acceso a la justicia en asuntos ambientales en las zonas donde sea ratificado.
Su objetivo es garantizar la implementación plena y efectiva de estos puntos que contribuyen a la protección del derecho de las comunidades y de las generaciones futuras, a vivir en un medio ambiente sano y al desarrollo sostenible en América Latina y el Caribe.
¿Cómo afecta este tratado en Chile?
Chile se encuentra trabajando en los tres aspectos que incluye el tratado, con el acceso a la información ambiental, la investigación, y la participación pública de los procesos de toma de decisiones a través del Ministerio de Medio Ambiente, que cuenta con diferentes departamentos que buscan transparentar los datos en torno a problemáticas ambientales.
Sin embargo, la adhesión y ratificación de Escazú fortalecerá estos puntos clave de la democracia ambiental y se complementará a los Objetivos de Desarrollo Sostenible para el 2030 a los que se ha suscrito nuestro país, que buscan combatir la crisis climática, avanzar hacia la igualdad de género y construir sociedades pacíficas en armonía con la naturaleza.
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