Científicos descubren remedio para proteger a las abejas

Las abejas de Chile y el mundo están sufriendo por la varroa, un parásito que afecta a la calidad de vida de estos insectos. Afortunadamente, un compuesto químico natural las ayuda a sanar fácilmente.

Las abejas son muy importantes para el medioambiente. Estos insectos ayudan a mantener los ecosistemas funcionando correctamente gracias a la polinización, que ayuda en la reproducción de las plantas, y en la producción de frutas y verduras. 

Los humanos, como también la flora y fauna se benefician de las abejas: sin su presencia, se produciría un efecto dominó que desestabilizará la cadena de alimentos en el planeta. 

En las últimas décadas, las abejas han sufrido diversas patologías y problemas que ponen en riesgo su presencia en los ecosistemas. En Chile y en el mundo, las abejas están siendo afectadas por el parásito de la varroa que causa la enfermedad más severa para las abejas melíferas.

La varroa destructor es un ácaro que se alimenta de los fluidos vitales internos de las abejas, causando deformaciones y debilidad en estos insectos polinizadores. Este parásito es originario de Japón, y se distribuyó por el mundo a partir del Siglo 20. 

Solución fácil y al alcance de todos

Hoy en día, en Chile y el mundo la varroa es un problema grave para la producción comercial de miel, como también para el bienestar de las abejas. Por esta razón un grupo de científicos chinos y taiwaneses descubrieron un remedio natural y muy efectivo para tratar esta enfermedad parasitaria.

Se trata del butirato de sodio, un compuesto químico que se puede encontrar naturalmente en el intestino grueso de los humanos, y que está formado por sodio, carbono, hidrógeno y oxígeno. 

El butirato de sodio tiene un desagradable aroma similar al de los establos de vaca o a la mantequilla rancia, pero es un excelente aliado de las abejas y de la miel debido a que esta sustancia puede reforzar la salud de estos insectos y evitar los ataques del ácaro de la varroa. 

La medicina que utilizaron los científicos consistió simplemente en añadir pequeñas dosis de butirato de sodio en agua endulzada con azúcar. El resultado es esperanzador, ya que este remedio mejora la inmunidad y previene deformaciones en las abejas. 

Este trabajo científico busca preservar la integridad de las abejas, similar a la iniciativa que instaló refugios para abejas en las paradas de autobuses de la ciudad de Utrecht en los Países Bajos. 

Lo bueno de este descubrimiento, es el hecho de que el butirato de sodio es una sustancia económica y asequible, por lo que podría ser una solución de fácil implementación en zonas vulnerables de Chile y el mundo.  

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