Conoce “la gran estafa” de la industria alimentaria

Cambios de nombre al referirse al azúcar en los etiquetados, reemplazo de unos ingredientes por otros igual o más nocivos y abuso frente a la ignorancia nutricional de los consumidores, son algunos de los engaños de esta industria.

En un mundo donde la información sobre la nutrición está al alcance de todos, es crucial distinguir entre hechos y mitos para tomar decisiones informadas sobre la salud. En este sentido, la falta de educación alimentaria y el gran interés actual por llevar a cabo una buena dieta han propiciado que aumenten los mitos sobre la alimentación saludable.

De hecho, según el último estudio realizado por Taste Tomorrow, el 75% de los chilenos encuestados quieren conocer la procedencia de los productos que consumen. Tanto así, que una de las tendencias que llegaron para quedarse es la hiper personalización, ya que 71% reveló que buscan alimentos que se adapten a su estilo de vida individual, el 69% considera que las opciones deben variar según la persona.

Si bien en un principio el objetivo es bajar algunas tallas, adoptar un estilo de vida más sano va más allá y, como explica Bárbara Álamo, experta en alimentación cetogénica y organizadora de Keto Stgo, "es importante que las personas comprendan que no todos los productos etiquetados como "saludables" realmente lo son, ya que muchos de ellos pueden tener altos niveles de azúcar, sal o calorías como manera de sustituir algún otro componente”. En este sentido según Álamo, algunos de los mitos más comunes son:

"Sin o bajo en grasa" significa sano

Uno de los mitos más extendidos es la creencia de que los productos etiquetados de esta forma son automáticamente buenos para la salud. Sin embargo, es importante recordar que la ausencia de grasa a menudo se compensa con altos niveles de azúcares o sal, lo que puede ser igual de perjudicial para la salud.

Los productos "sin gluten" son mejores para todos

A menos que una persona tenga enfermedad celíaca o sensibilidad al gluten, no hay evidencia que sugiera que una dieta sin gluten sea necesariamente más beneficiosa. De hecho, los productos sin este componente generalmente contienen una cantidad significativa de carbohidratos y pueden carecer de otros nutrientes esenciales.

"La clave para una correcta alimentación radica en la educación nutricional. Debemos enseñar a las personas cómo leer y comprender las etiquetas de lo que consumen, junto con saber qué buscar al tomar decisiones alimenticias. Además, alentar a todos a fomentar la consulta con especialistas en nutrición es esencial para obtener orientación personalizada y basada en evidencia, lo que nos ayudará a desmitificar los conceptos erróneos y a construir una base sólida para una dieta equilibrada", comenta Álamo.

Además de los mitos, es fundamental reconocer que algunos productos que frecuentemente se perciben como sanos y pueden no serlo. Algunos ejemplos incluyen:

• Barras de granola: Estas a menudo contienen azúcares añadidos y pueden tener tantas calorías como una barra de chocolate.
• Bebidas deportivas: A menos que se trate de un atleta que realiza entrenamientos muy intensos, estas bebidas pueden añadir altos niveles de azúcares innecesarios para una dieta equilibrada.
• Yogures con sabor: A pesar de ser una fuente excelente de proteínas y probióticos, muchas versiones con sabor tienen azúcares añadidos, solo que, con otro nombre como dextrosa, jarabe de glucosa, entre otros.
• Cereales: Aunque se anuncian como buenos para la salud, muchos cereales tienen altos niveles de azúcar y calorías.

En resumen, para tomar buenas decisiones, es primordial que las personas aprendan a leer y comprender las etiquetas, cuestionen los mitos comunes y busquen la orientación de profesionales en nutrición. “En este sentido, es esencial ser un buen ejemplo en la familia al adoptar una alimentación equilibrada y consciente, ya que puede tener un impacto positivo a largo plazo en la salud junto a los buenos hábitos de las generaciones futuras reduciendo los índices de obesidad y formando una población más sana", concluye la organizadora de Keto Stgo.

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