Descubre cómo las semillas pueden ayudarte durante el ciclo menstrual

Incluir diferentes semillas a la dieta puede contribuir a regular las hormonas, mejorar el síndrome pre menstrual y mitigar los síntomas de la menopausia.

¿Sabían que tu alimentación puede impactar en tu ciclo menstrual? Gracias a su aporte de ácidos grasos saludables, minerales, vitaminas y otros fitonutrientes, las semillas contribuyen a una fabricación y metabolismo óptimos de las hormonas que actúan durante los periodos.

El ciclo de las semillas o seed cycling es una técnica que mejora o inhibe la producción de estrógeno y progesterona en el cuerpo, equilibrando y optimizando así sus hormonas y aliviando los síntomas debido al desequilibrio hormonal. 

Para comprender mejor el ciclo de las semillas, debemos entender las dos fases principales del ciclo menstrual: los primeros 14 días constituyen la fase folicular, mientras que los siguientes 14 días constituyen la fase lútea. Esto ocurre cuando los niveles hormonales están equilibrados, ya que el estrógeno aumenta durante la primera mitad de su ciclo y disminuye en la segunda. 

Sin embargo, los problemas empiezan cuando hay un desequilibrio entre el estrógeno y la progesterona, el que puede contribuir a los síntomas del síndrome premenstrual, los cólicos menstruales, el acné, la anovulación, los ciclos irregulares y la pérdida de menstruación. 

Cómo influyen las semillas en las hormonas

Las semillas tienen diferentes tipos de propiedades que ayudan al organismo y en este caso, los fitoestrógenos en las semillas de lino, girasol y sesamo pueden ayudar a aumentar o disminuir los niveles de estrógenos debido a los fitoestrógenos, que son compuestos que existen en las plantas que pueden imitar la acción de las hormonas. 

Además, se afirma que el zinc de las semillas de calabaza promueve la producción de progesterona y el sésamo impide que los niveles de estrógeno aumenten demasiado debido a su alto contenido de polifenoles que también ayudan a reducir los malestares. 

Qué semillas consumir durante cada fase:

• Fase folicular: Es la primera parte del ciclo menstrual, desde el primer día de sangrado hasta la ovulación y generalmente dura dos semanas. En esta fase se recomienda comer a diario una cucharada de lino y una cucharada de semillas de calabaza que aportan con hierro, zinc y omega 3 y, además, apoyan la producción serotonina y melatonina, que pueden ayudar a mejorar los dolores de los primeros días de la menstruación.
• Fase lútea: Es la segunda parte del ciclo menstrual durante, es decir, empieza el día después de la ovulación y dura hasta la siguiente regla. En esta fase se recomienda cambiar al consumo diario de semillas de girasol y sésamo que son ricas en ácidos grasos omega-6, vitamina B6 y selenio, que ayudan con producción de progesterona favorecen la desintoxicación y eliminación del exceso de hormonas del cuerpo y reducen la inflamación.

Podemos incorporar las semillas a la dieta de una forma sencilla, triturándolas y añadiendo el polvo encima de cualquier alimento como lo son ensaladas, batidos de frutas y preparaciones horneadas para así poder captar sus propiedades en cualquier comida del día.

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