Maqui: la súper fruta chilena que previene el cáncer

Las propiedades nutritivas de esta fruta autóctona de Chile provocó una revolución internacional, debido a que es el alimento con la mayor cantidad de antioxidantes en el mundo.

El maqui es un arbusto chileno endémico de las regiones de Coquimbo en el norte hasta Aysén en el sur. La fruta de esta planta es una baya jugosa de color negro intenso, con un marcado sabor dulce y áspero.

Además es un potente manchador, pues tiñe de color morado la piel y labios de quien come esta fruta. Esto se debe a la gran concentración de antocianina, un flavonoide de color azul que es muy apreciado en el mercado internacional por su alto poder antioxidante.

Para envidia de los otros países, en Chile podemos encontrar maqui muy económico. Este es el caso del Mercado Más Región, marketplace que vende 80 gramos de este producto a tan solo $6.500. Por esos mismos ochenta gramos en el extranjero podrías pagar hasta 100 dólares.

Protege frente al cáncer

Según diversos estudios, el maqui es una de las súper frutas del futuro debido a su alta cantidad de nutrientes, flavonoides y por la alta protección que ofrece ante los radicales libres.

Los radicales libres son moléculas inestables que el organismo produce durante el metabolismo normal de las células. Los radicales libres se acumulan en el cuerpo, causan estragos a lo largo del tiempo y aumentan la posibilidad de padecer cáncer. 

En cambio, las antocianinas y flavonoides son sustancias protectoras, y contrarrestan el daño que generan los radicales libres en el organismo. Estas sustancias se encuentran en uvas, vino tinto, berenjenas y en mayor medida en el maqui chileno. 

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Fruta favorita de los niños del campo

El maqui es parte del paisaje de la zona centro y sur de nuestro país. Años atrás esta fruta no tenía valor comercial, por lo que se podía encontrar de manera salvaje en los bosques y matorrales. 

Las aves y los niños pequeños eran los únicos interesados en comer de esta fruta, debido al fuerte color que se desprende al manipularla. Su sabor es ligeramente dulce, astringente y refrescante, y encontrar un maqui es un premio después de un largo paseo en el campo. 

El maqui en el mercado internacional

En la actualidad, el maqui atrae los ojos del mundo entero porque se considera como la fruta con mayor poder antioxidante del mercado. Si antes solo se disfrutaba del maqui al pie de la mata, hoy existen formas de consumo más sofisticadas, como polvos o píldoras procesadas en laboratorios. 

Desde hace pocos años, laboratorios chilenos comenzaron a congelar esta fruta, para luego desarrollar polvos concentrados que se venden en países como Estados Unidos, Japón, Alemania, entre muchos otros. 

En el mercado internacional el maqui es una revolución, siendo parte importante de la dieta de los famosos. El polvo de maqui se usa generalmente en batidos, aportando un curioso color púrpura que llama la atención de las redes sociales.

Cultivo sustentable

En un momento, el maqui estuvo sobre explotado debido al fuerte interés internacional. Hoy en día se desarrollan grandes esfuerzos científicos para cultivar esta especie de manera sustentable.

En el pasado, el cultivo comercial de maqui se limitaba a 1 hectárea. En el 2021 esta cifra aumentó a 27 hectáreas, demostrando el gran interés exponencial que tiene esta planta chilena. 

Autoridades chilenas y universidades descubrieron que los arbustos de maqui del centro del país son más resistentes a la sequía, por lo que se están utilizando ejemplares de esta zona con fines comerciales.

Si en el pasado el maqui crecía a su suerte a lo largo del territorio nacional, al día de hoy la industria y las autoridades están enfocadas en cultivar y propagar esta especie de manera responsable, respetando la figura sagrada de este árbol para la cosmovisión mapuche. 

Curiosamente, esta fruta que en el pasado era apetecida por los niños, las aves y las comunidades indígenas, ahora tiene grandes seguidores a nivel mundial, por lo que se abre la oportunidad de cultivar los campos del país con una especie endémica, y de paso fomentar a la industria nacional.

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