Desarrollan recubrimiento biodegradable a base de plantas para envolver alimentos

El nuevo envoltorio para alimentos es una alternativa al plástico, ya que es totalmente biodegradable y tiene propiedades antibacterianas.

El envasado de alimentos de un solo uso está afectando enormemente a nuestro medio ambiente, ya que según la iniciativa Exige Alternativas de Greenpeace, estos se han convertido en uno de los residuos dominantes en el flujo de desechos global.

Es por esto que, con el objetivo de producir una alternativa respetuosa con el medio ambiente a los envoltorios y recipientes de plástico para alimentos, científicos de la Universidad Rutgers en Estados Unidos desarrollaron un recubrimiento biodegradable a base de plantas que se puede rociar sobre los alimentos, protegiéndolos contra microbios y deterioro en el transporte.

Este nuevo producto logra ser una opción al film transparente, reconocido envoltorio portátil y barato que mantiene las sobras en buen estado durante más tiempo, pero que contribuye a la crisis de contaminación porque cuesta reciclarlo y está compuesto de sustancias químicas potencialmente perjudiciales para los suelos.

¿Cómo se desarrolla el producto?

Esta nueva tecnología utiliza fibras basadas en polisacáridos y biopolímeros extraídos de desperdicios de frutas y verduras. Desde este elemento, se elabora un material fibroso que se puede hilar desde un dispositivo de calentamiento que se parece a un secador de pelo y que puede "envolver" alimentos de varias formas y tamaños.

Este spray resultante es lo suficientemente resistente como para protegerlos de golpes que se puedan producir en su traslado y contiene agentes antimicrobianos naturales, como aceite de tomillo y ácido cítrico, que combaten el deterioro y los microorganismos patógenos como E. coli y listeria.

Envoltorio puesto a prueba

Con la investigación se demostró que el recubrimiento prolongó la vida útil de paltas en un 50%. Así también, este revestimiento se puede enjuagar con agua y se degrada en el suelo en tres días, lo que evidencia su potencial como un nuevo packaging sustentable para cualquier tipo de alimento.

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