Huertos industriales: la innovación que está transformando la manera de cultivar y cocinar en San Pedro de Atacama

La tecnología implementada permite cultivar más de 20 especies de hojas verdes, hierbas y especias libres de pesticidas, enriquecidas con nutrientes y disponibles durante todo el año.

Wefarm, una innovadora startup chilena especializada en huertos verticales, está marcando un antes y un después en la producción de alimentos en zonas áridas. Su primer proyecto a gran escala, ubicado en la región de Antofagasta, ha logrado cultivar más de mil hortalizas y plantas verdes en San Pedro de Atacama, abasteciendo a emprendedores locales con productos frescos y de calidad, como lechugas, rúcula, kale, acelgas, albahacas, cilantro, orégano y stevia.

Un proyecto de triple impacto para el desierto

Este proyecto piloto instaló un huerto vertical industrial en el Hotel sostenible Atacama Loft & Glamp. La tecnología implementada permite cultivar más de 20 especies de hojas verdes, hierbas y especias libres de pesticidas, enriquecidas con nutrientes y disponibles durante todo el año.

El impacto del proyecto trasciende lo gastronómico, reduciendo la dependencia de alimentos transportados desde la zona central del país, un proceso que representa más del 70% de las hortalizas consumidas en la región y genera una alta huella de carbono.

“Identificamos una necesidad real en el abastecimiento de verduras locales. Con este proyecto, estamos cerrando esa brecha, reduciendo significativamente el impacto ambiental y fomentando la soberanía alimentaria en la región”, señaló Ana María Arrau, CEO de Wefarm.

Tecnología de eficiencia y sostenibilidad

Los módulos verticales desarrollados por Wefarm son un ejemplo de eficiencia en el uso de recursos. Estos sistemas permiten ahorrar hasta un 95% de agua en comparación con la agricultura tradicional, optimizando además la energía y el espacio requerido para cultivar en condiciones extremas como las del desierto de Atacama.

El modelo no requiere especialistas para su operación, ya que Wefarm entrega las semillas, capacita a los encargados y asegura un producto final listo para el consumo. Este enfoque lo convierte en una solución ideal para hoteles, restaurantes, colegios y hospitales.

Impacto en la comunidad local

El proyecto también busca generar un impacto positivo en la comunidad local mediante la transferencia de conocimiento. En colaboración con el Liceo Bicentenario Agropecuario Likan Antai, estudiantes en práctica profesional han participado en el mantenimiento de los cultivos, aprendiendo directamente sobre tecnología agrícola sostenible.

“No solo queremos aportar con tecnología, sino también con conocimiento, dejando un legado educativo en la comunidad y formando a futuros profesionales del sector agropecuario,” destacó Arrau.

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