Mundo “Gamer” y eSports: su impacto en el medioambiente

Aunque implica un elevado consumo energético, también puede aportar un mensaje muy importante y beneficioso a la sociedad.

Estamos en una era en la que la concienciación por la salud de nuestro planeta ha aumentado enormemente. Lo vemos aplicado en casi todos los sectores: en la construcción, con la elección de los materiales; en la industria, con la emisión de gases; en el transporte, con la utilización de combustibles alternativos; y la lista podría continuar… El mundo digital también ha tomado consciencia de esta preocupación y uno de sus mercados más importantes, el del “Gaming”, está estudiando su impacto en el apartado medioambiental. 

A priori, no todo el mundo ve una relación directa entre una área y la otra. Pero es que los videojuegos dejaron, hace tiempo, de ser algo anecdótico. Hoy es un mercado de un valor superior a los 250.000 millones de dólares y, como tal, su desarrollo tiene consecuencias en el planeta. Tan sólo en Estados Unidos, se calcula que los videojuegos son el 2,5% del consumo total eléctrico en los hogares y generan una contaminación equivalente a 5 millones de coches, según datos de 2020. 

Cabe señalar que, en estas emisiones, tiene mucho que ver la fabricación de los juegos en su formato físico; algo que, afortunadamente, está cambiando con celeridad gracias a las descargas digitales y los juegos en la nube. Sin embargo, el uso de más servidores para la “cloud” también representa un mayor consumo energético. Para evitar este aumento, los fabricantes están apostando por actuar en los dispositivos, como las consolas, priorizando el ahorro energético en sus diseños. Incluso, para tener un impacto medioambiental menor, se trabaja en los envoltorios de estos aparatos, con el objetivo de generar menos residuos. 

Lo que parece estar claro es que el universo “Gamer” tiene, sin duda, su propio impacto en el medioambiente y que hay que actuar con determinación en este sector. Pero no todo el impacto es, necesariamente, negativo. Su carácter lúdico y su popularidad hacen que lleguen a una gran parte de la sociedad, por lo que tiene una profunda influencia en millones de personas que, además, pertenecen a diversas generaciones y tienen mucho que aportar al cuidado del planeta. 

Por ello, incluso la organización Naciones Unidas involucró a los videojuegos en su campaña “Playing for the Planet”, con el objetivo de concienciar a la población sobre el daño que los humanos provocamos en el planeta. También, a través de iniciativas públicas y privadas en diferentes países, se han lanzado títulos con temáticas relacionadas con la ecología, como “Gera”, “Planet Rescuers” o “CLMNTK”. Otros juegos, de gran popularidad, incluyen estos asuntos en su trama argumental, como “Civilization VI” o “Los Sims 4”.

Una de las vías más potentes para llegar a un gran público es la de los eSports: las competencias de videojuegos, que hoy ya son uno de los espectáculos deportivos con mayores audiencias. La naturaleza tecnológica de los deportes electrónicos propicia un mayor seguimiento en la red, principalmente mediante plataformas como Twitch o YouTube, de los eventos más relevantes de los eSports, en lugar del ritual de la asistencia presencial (aunque también existe esta posibilidad). Esto implica un menor número de desplazamientos, con la consiguiente reducción de emisión de gases y uso de los combustibles fósiles. Además, el aumento de torneos locales también ayuda a evitar estos viajes. 

Pero, además, es un vehículo de excepción para hacer llegar a muchos aficionados el mensaje de la importancia del cuidado medioambiental. En 2021 ya hubo una importante iniciativa para concienciar a los seguidores, y a la población en general, en la campaña “La Hora del Planeta”, organizada por la prestigiosa institución WWF, que contó con el protagonismo de los eSports. Y no es el único ejemplo; algunos eventos están incluyendo estos mensajes durante su emisión y animan a sus espectadores a implicarse con diversas causas por la protección del planeta. 

En definitiva, pese a que es innegable que el impacto de este mundo “Gamer” tiene consecuencias en el medioambiente, que no son las más deseables, también puede cumplir una poderosa y beneficiosa función en el cuidado del planeta a través de su influencia en una parte cada vez mayor de la población, ya que casi un 40% de la población mundial en aficionada a los videojuegos; y esta cifra va en aumento.  

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