ONG sugiere poner fin a la ganadería industrial para frenar la gripe aviar

La ONG Sinergia Animal alerta sobre la grave crisis de la gripe aviar H5N1, que ha matado a más de 280 millones de aves desde 2021. La solución: reducir la ganadería industrial y adoptar sistemas alimentarios más sostenibles.

Desde octubre de 2021, más de 280 millones de aves han perdido la vida a causa de la mortal gripe aviar H5N1, una de las peores crisis de vida silvestre en la historia reciente. Este brote no solo ha afectado a diversas especies en peligro de extinción, sino también a mamíferos, lo que aumenta el riesgo de transmisión a humanos. 

La ONG internacional Sinergia Animal hace un llamado urgente para abordar la raíz del problema: la ganadería industrial, que crea un ambiente propicio para el surgimiento de enfermedades.

Una crisis ignorada

El H5N1 fue descubierto por primera vez en 1996 en China, y desde entonces ha causado estragos en la fauna mundial. Ha afectado a 485 especies de aves y 48 especies de mamíferos, y la tasa de letalidad en humanos es alarmante, alcanzando un 50%. Carolina Galvani, Directora Ejecutiva de Sinergia Animal, señala que la crisis requiere atención global inmediata, advirtiendo que, aunque la transmisión entre humanos es poco común, el virus podría mutar y volverse más peligroso.

Ganadería industrial: un criadero de enfermedades

La ganadería industrial, con sus condiciones de hacinamiento e insalubridad, facilita la rápida propagación de enfermedades. Un estudio de la Universidad de Harvard destaca la conexión entre este tipo de producción y el riesgo de enfermedades zoonóticas, sugiriendo que reducir la cría intensiva de animales es clave para prevenir futuras pandemias.

Aunque países como Argentina han logrado ser declarados libres de H5N1, la región aún enfrenta desafíos significativos. Brotes recientes en Brasil y Colombia subrayan la necesidad de una vigilancia constante y cooperación regional.

Hacia un futuro sostenible

Sinergia Animal insta a poner fin a la ganadería industrial y adoptar sistemas de producción más sostenibles. “Debemos dejar de financiar prácticas dañinas e invertir en alternativas basadas en plantas que protejan la salud pública y la biodiversidad,” afirma Galvani.

Para más información sobre cómo detener la ganadería industrial y promover un futuro más saludable, visita la campaña de Sinergia Animal.

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